La moral heterónoma se refiere a la forma en que los niños y niñas menores de 9 años entienden y aceptan las normas y valores establecidos por los adultos. En esta etapa de desarrollo, los niños consideran que las normas externas son absolutas y deben ser cumplidas sin cuestionarlas.
Definición de Moral Heterónoma
La moral heterónoma se refiere a la forma en que los niños y niñas menores de 9 años entienden y aceptan las normas y valores establecidos por los adultos. En esta etapa de desarrollo, los niños consideran que las normas externas son absolutas y deben ser cumplidas sin cuestionarlas. Evaluán los actos no por su naturaleza o ética detrás, sino por la necesidad de obedecer la autoridad de los adultos.
Características de la Moral Heterónoma en la infancia
Aceptación ciega de las normas establecidas por los adultos. No se cuestionan las normas, se aceptan sin reflexionar. Se considera que cumplir con las normas es lo correcto y no hacerlo es lo incorrecto. No se desarrolla el sentido crítico para cuestionar las palabras de los adultos. Se cree que los adultos son infalibles y su palabra es ley.
La aceptación ciega de las normas establecidas
La aceptación ciega de las normas establecidas es una de las características más prominentes de la moral heterónoma en la infancia. Los niños de esta etapa de desarrollo aceptan las normas y valores establecidos por los adultos sin cuestionarlas ni reflexionar demasiado sobre ellas. Esto se debe a que, en este momento, los niños están aprendiendo a adaptarse a las normas sociales y a entender que los adultos tienen una autoridad natural sobre ellos.
La no cuestión de las normas, se aceptan sin reflexionar
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La creencia de que los adultos son infalibles
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Se cree que los adultos son infalibles y su palabra es ley. Los niños pequeños no cuestionan las palabras de los adultos, creyendo que están en conocimiento pleno y que no cometen errores. Esta creencia es fundamental en la moral heterónoma, ya que hace que los niños acepten las normas y valores establecidos por los adultos sin cuestionarlos.
Funcionamiento en la infancia
En este tipo de moral, los niños consideran que las normas deben ser cumplidas sin preguntar por qué. Los niños no comprenden que las normas puedan ser flexibles o cambiantes. No pueden comprender las motivaciones detrás de una conducta que puede violar una norma. Los niños aceptan que la autoridad de los adultos es infalible y no cuestionan sus instrucciones.
La imposición de normas sin explicaciones
La imposición de normas sin explicaciones es una característica de la moral heterónoma. Los niños menores de 9 años aceptan las normas establecidas por los adultos sin necesidad de comprensión o reflexión.
La aceptación de las normas sin cuestionar
Los niños consideran que las normas deben ser cumplidas sin preguntar por qué. No comprenden que las normas puedan ser flexibles o cambiantes. No pueden comprender las motivaciones detrás de una conducta que puede violar una norma. Los niños aceptan que la autoridad de los adultos es infalible y no cuestionan sus instrucciones.
Desarrollo de la Moral Heterónoma en la infancia
La moral heterónoma se refiere a la forma en que los niños y niñas menores de 9 años entienden y aceptan las normas y valores establecidos por los adultos. En esta etapa de desarrollo, los niños consideran que las normas externas son absolutas y deben ser cumplidas sin cuestionarlas. Evaluán los actos no por su naturaleza o ética detrás, sino por la necesidad de obedecer la autoridad de los adultos.
Suceda aproximadamente entre los 6 y 8 años
Sucede aproximadamente entre los 6 y 8 años, cuando los niños comienzan a desarrollar su propio pensamiento crítico y a cuestionar las normas establecidas por los adultos. En este momento, los niños pueden empezar a reflexionar acerca de la justicia o injusticia de determinadas normas y a considerar las posibles consecuencias de ciertas acciones. Esto puede llevar a un aumento en la toma de decisiones autónomas y una mayor capacidad para justificar sus acciones.
Conclusión
La moral heterónoma es un proceso crítico en el desarrollo moral infantil, en el que los niños menores de 9 años entienden y aceptan las normas y valores establecidos por los adultos. Durante esta etapa, los niños no cuestionan las normas, ya que consideran que las autoridades son infalibles. Sin embargo, esta etapa de desarrollo es importante para la formación de la personalidad y la educación de los niños.
A medida que crecen, los niños comienzan a desarrollar su propio pensamiento crítico y a cuestionar las normas establecidas, lo que marca el final de la moral heterónoma y el comienzo de la construcción de su propio sentido moral. Es fundamental para los padrões educativos comprender y acoger esta etapa de desarrollo, para ofrecer una educación segura y efectiva a los niños.
