La salsa Worcestershire es una de las salsas más populares y versátiles que se utilizan en la cocina. Sin embargo, comprarla en una tienda puede resultar cara y no siempre se ajusta a nuestras preferencias de sabor. ¡Pero no te preocupes! Con la receta de Bruno Oteiza, podrás prepararla en casa de manera fácil y auténtica. En este artículo, te guiaré paso a paso a través del proceso de preparación de esta deliciosa salsa, desde la selección de los ingredientes hasta el momento en que la salsa está lista para ser disfrutada en tus platillos favoritos.
Con solo 13 ingredientes, podrás crear esta salsa líquida fermentada que es tan fundamental en la cocina inglesa. La receta requiere un poco de paciencia, ya que se necesita dejarla reposar durante al menos dos semanas. Pero el resultado es bien vale la pena la espera. La salsa Worcestershire casera es una forma de dar un toque especial a tus platos, desde hamburguesas y sandwiches hasta carnes asadas y platos de mariscos.
Orígenes y historia de la salsa Worcestershire
La salsa Worcestershire es una de las salsas más populares y versátiles del mundo, y su historia se remonta al siglo XIX en la ciudad de Worcester, Inglaterra. La leyenda cuenta que el duque de Worcester, Lea y Perrins, encargó a dos farmacéuticos locales, John Wheeley Lea y William Henry Perrins, que crearan una salsa que reproduciría el sabor de una receta que había traído de sus viajes a la India. Los farmacéuticos trabajaron arduamente en la fórmula, pero al principio no lograron crear una salsa que fuera del agrado del duque.
Después de varios intentos fallidos, Lea y Perrins decidieron dejar la mezcla a fermentar durante varios meses. Fue entonces cuando sorprendentemente, la mezcla se convirtió en una salsa oscura y rica que agradó ampliamente al duque de Worcester. Esta salsa se convirtió en una sensación en la ciudad y pronto se extendió por todo el Reino Unido. En 1837, Lea y Perrins fundaron una fábrica para producir la salsa en masa y llamaron a la salsa «Worcestershire» en honor a la ciudad de Worcester. Desde entonces, la salsa Worcestershire se ha convertido en un ingrediente esencial en la cocina británica y en todo el mundo.
Ingredientes necesarios para la receta
Para preparar la auténtica salsa Worcestershire casera, necesitarás los siguientes 13 ingredientes:
Para el macerado: 250 gramos de cebolla picada, 50 gramos de ajo picado, 50 gramos de anchoas picadas, 100 gramos de salsa de soja, 100 gramos de vinagre blanco, 50 gramos de melaza y 25 gramos de azúcar morena.
Para la mezcla de especias: 1 cucharadita de mostaza en polvo, 1 cucharadita de pimienta recién molida, 1 cucharadita de cilantro molido, 1 cucharadita de jengibre molido, 1 cucharadita de canela en polvo, 1 cucharadita de clavo en polvo y sal al gusto.
Recuerda que la calidad de los ingredientes es fundamental para lograr el sabor auténtico de la salsa Worcestershire.
Preparación de la mezcla de ingredientes
Para comenzar, pele y pique finamente la cebolla y el ajo. En un tazón, mezcle la cebolla y el ajo picados con las anchoas escurridas y picadas. Agregue la salsa de soja, el vinagre blanco, la melaza, la mostaza en polvo, el clavo molido, el jengibre molido, la pimienta blanca y la pimienta negra. Mezcle bien todos los ingredientes hasta que estén bien combinados.
Luego, agregue el agua y mezcle hasta que la mezcla esté suave y homogénea. Pase la mezcla a una sartén o cacerola y cocine a fuego medio durante 20 minutos, revolviendo ocasionalmente, hasta que la mezcla tenga un consistency espesa y ligeramente caramelizada.
Cocinado y fermentación de la salsa
Cocinado y fermentación de la salsa
Una vez que hemos triturado todos los ingredientes, es hora de cocinar la mezcla. En una olla grande, coloque todos los ingredientes y cocine a fuego medio durante 20 minutos, revolviendo ocasionalmente, hasta que la mezcla haya reducido un poco y tenga un olor intenso. Asegúrese de revolver constantemente para evitar que la mezcla se queme.
Después de cocinar la mezcla, dejarla enfriar a temperatura ambiente. Luego, transfiérala a una botella de vidrio con tapa hermética y déjela reposar en un lugar fresco y oscuro durante al menos dos semanas. Es importante agitar la botella cada día o dos para permitir que la fermentación avance correctamente. Con el tiempo, la mezcla comenzará a fermentar y desarrollará un sabor intenso y complejo.
Durante el proceso de fermentación, es posible que notes que la mezcla comience a burbujear ligeramente o produzca un olor ligeramente ácido. Esto es completamente normal, ya que la fermentación es un proceso natural que ayuda a desarrollar el sabor y la textura de la salsa. Después de dos semanas, la salsa estará lista para usar y disfrutar.
Tips y trucos para una fermentación perfecta
Tips y trucos para una fermentación perfecta
Mantén la limpieza y la higiene: Es fundamental mantener todos los utensilios y recipientes limpios y esterilizados para evitar la contaminación bacteriana. Lava tus manos antes de iniciar el proceso y asegúrate de que todos los elementos estén libres de bacterias y mohos.
Controla la temperatura: La temperatura ambiente ideal para la fermentación de la salsa Worcestershire es entre 20°C y 25°C. Asegúrate de deixar la mezcla en un lugar fresco y alejado de fuentes de calor.
Agita con frecuencia: Agitar la mezcla con frecuencia durante los primeros jours ayudará a que los ingredientes se mezclen adecuadamente y favorecerá la fermentación. Sin embargo, evita agitar excesivamente, ya que esto puede dañar las bacterias beneficiosas.
Ten paciencia: La fermentación es un proceso lento y requiere tiempo. No te preocupes si no ves resultados inmediatos. Deja que la mezcla repose durante al menos dos semanas, y no te sorprendas si la fermentación tarda un poco más en completarse.
Vigila el olor y el sabor: Durante la fermentación, la mezcla puede desarrollar un olor fuerte y desagradable. No te preocupes, esto es normal. Sin embargo, si nota un olor rancio o desagradable, es posible que la fermentación no esté sucediendo correctamente.
Conservación y almacenamiento de la salsa
Una vez que la salsa haya fermentado correctamente, es importante almacenarla de manera adecuada para preservar su sabor y textura. La salsa Worcester casera se debe almacenar en un lugar fresco y oscuro, lejos de la luz directa del sol. Es recomendable guardarla en la nevera, donde se puede conservar durante varios meses.
Es importante etiquetar adecuadamente el frasco con la fecha de elaboración y el contenido, para asegurarse de que se consume antes de que pierda su sabor y textura. Antes de servir, agitar bien el frasco para que los ingredientes se mezclen adecuadamente. Si se observa algún signo de deterioro, como moho o olor desagradable, es mejor desechar la salsa y elaborar una nueva tanda.
También se puede congelar la salsa Worcester casera si se desea conservarla durante un período más largo. Simplemente se debe distribuir la salsa en pequeños recipientes o cubitos de hielo, y luego congelarlos. De esta manera, se puede descongelar la cantidad necesaria según sea necesario.
Usos y combinaciones de la salsa Worcestershire
La salsa Worcestershire es un condimento versátil que se puede utilizar de diversas maneras para agregar profundidad y complejidad a una variedad de platillos. Puedes utilizarla para realzar el sabor de otras salsas, como la salsa de tomate o la salsa barbecue, o como un ingrediente adicional en salsas y aliños.
La salsa Worcestershire también es un excelente aderezo para platos crudos o cocinados. Puedes agregarla a la mezcla de ensaladas, como una ensalada de atún o una ensalada de pollo, para darle un toque umami. También es deliciosa como un aderezo para carnes asadas o a la parrilla, como bistecs o pollo asado.
Además de su uso en la cocina, la salsa Worcestershire es un ingrediente fundamental en algunos cócteles clásicos, como el Bloody Mary o el Caesar. Su sabor picante y umami añade una capa adicional de complejidad a estas bebidas. Experimenta con diferentes combinaciones y descubre tus usos favoritos para la salsa Worcestershire casera.
Variaciones y modificaciones de la receta
Aunque la receta original de Bruno Oteiza es clásica y auténtica, siempre hay espacio para experimentar y personalizar la salsa Worcestershire casera según tus gustos y preferencias. Una de las formas de variar la receta es cambiar la cantidad o tipo de anchoas utilizadas. Si no eres fanático de la salinidad intensa, puedes reducir la cantidad de anchoas o sustituirlas por otros ingredientes como aceitunas o algas marinas.
Otra forma de modificar la receta es agregar o remplazar algunas especias. Por ejemplo, puedes agregar una cucharadita de mostaza en polvo para darle un toque picante, o remover la canela y el clavo si no te gustan las especias «calientes». También puedes experimentar con diferentes tipos de vinagres, como vinagre de manzana o vinagre balsámico, para darle un sabor más suave o complejo.
Si deseas una salsa Worcestershire más espesa y rica, puedes reducir la cantidad de vinagre o agregar un poco de mantequilla o aceite de oliva para darle una textura más cremosa. Por último, no dudes en probar diferentes tipos de salsa soja o tamari para darle un sabor más intenso o umami. Recuerda que la clave para elaborar una buena salsa Worcestershire es probar y ajustar según tus gustos, así que no tengas miedo de experimentar y encontrar tu propia fórmula secreta.
Conclusión
Conclusión
Finalmente, después de dos semanas de paciencia y dedicación, podrás disfrutar de una deliciosa salsa Worcestershire casera, perfecta para agregar un toque de sabor y personalidad a tus platos favoritos. Esta receta de Bruno Oteiza te permitirá experimentar con nuevos sabores y texturas, y descubrir los secretos detrás de esta salsa clásica.
Preparar la salsa Worcestershire en casa no solo te ahorrará dinero, sino que también te dará la libertad de personalizarla a tu gusto. Puedes ajustar la cantidad de ingredientes, agregar o eliminar elementos para adaptarla a tus preferencias. Así que no dudes en experimentar y crear tus propias variaciones.
Disfruta de tu salsa Worcestershire casera en ensaladas, carnes asadas, platos de pasta, o como ingrediente en tus cócteles favoritos. La posibilidades son infinitas, y con esta receta, tendrás la oportunidad de explorar nuevos horizontes culinarios. ¡Así que prepárate a sorprender a tus amigos y familiares con tu nueva creación!